En Man Kaizen estamos convencidos de que nosotros creamos nuestra propia realidad. Si has leído otros artículos, habrás podido comprobar que somos partidarios de diseñar nuestra propia vida a nuestro gusto.
Por eso, en este artículo entenderemos un poco más la realidad, o lo que te piensas que es la realidad.
Lo primero que tienes que saber es que cada uno de nosotros creamos nuestra propia realidad. Lo que es “real” para ti puede que no lo sea para otra persona y viceversa. Por tanto, este es un tema muy interesante que sin duda te va a ayudar!
En este artículo entenderás mejor cómo crear tu propia realidad y entenderás cómo funciona este proceso. en artículos futuros, veremos cómo podemos manipular nuestra realidad. Este artículo es la base para que entiendas cómo funciona lo que tú crees que es tu realidad. Disfruta.
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¿Qué es la realidad?
Esta pregunta nos puede dar para escribir un libro con diferentes volúmenes. Pero nos centraremos en definir la realidad de una manera sencilla que te será de ayuda para cambiar tu vida.
La realidad es todo aquello que crees que es real.
Así de simple y de sencillo. Todo lo que crees que es real, es la realidad. Pero ojo, es la realidad según tu punto de visto, pero no quiere decir que sea la realidad de otra persona. Por eso, es importante que sepas que puedes manipular lo que crees que es real. Puedes hacerlo, y al hacerlo, conseguirás cambiar tu vida.
Date cuenta que antes pensábamos que la tierra era plana. Ahora creemos que la tierra es redonda. Quien sabe. A lo mejor en 500 años se dice otra teoría diferente de la tierra. No lo sabemos.
Lo mismo pasa con las personas. Las personas creen ciertas cosas, de ellos y del mundo que les rodea, y se aferran a esas creencias como si fuesen completamente ciertas. Por eso vemos peleas entre partidos políticos. Unos tienen ciertas creencias y otros tienen otras diferentes.
Las creencias y las realidades de cada uno nos ha llevado a las guerras. Así de simple. Estarás de acuerdo conmigo con que lo que creas crea tu realidad.
Si crees que eres gordo por naturaleza, esa es tu creencia, y por tanto, tu realidad. Si piensas que no eres bueno en mates, esa es tu creencia, y por tanto, tu realidad. Así de simple.
A continuación vamos a ver dos tipos de realidades para que lo entiendas todavía mejor y puedas empezar a crear tu propia realidad.
#1: REALIDAD INTERNA:
La realidad interna es todo aquello que piensas que es real acerca de ti. Es tu realidad interna. Aquí es donde te identificas como tal y tal.
Soy Juan y me da miedo hablar en público. Soy Juan y me da miedo que me rechacen. Soy Juan y no soy muy listo. Es tu mundo interno, por tanto es tu realidad interna.
Lo que tienes que saber es que tu mundo interno crea tu mundo externo. Por tanto, si tus creencias son que no eres muy bueno en xyz, significa que verás esa creencia validada en tu mundo externo. Así de simple.
#2: REALIDAD EXTERNA:
La realidad externa es todo aquello que te piensas que es real del mundo que te rodea. Esto también incluye a las personas que te rodean.
Ejemplos de una realidad externa puede ser que creas que todo el mundo es hostil, o que todo el mundo tiene malas intenciones, o que los hombres son tal o las mujeres son tal. Esta es tu realidad externa.
Si crees que las personas son malas por naturaleza, encontrarás esto reflejado en tu mundo externo. Si crees que las personas te tratan mal, esto es lo que verás reflejado en tu mundo externo. Al fin y al cabo, es tu realidad externa.
Juntando los 2 modelos de realidad:
Como has podido ver, hemos hecho una distinción entre la realidad interna y la realidad externa.
Ambas realidades crean tu realidad. Ambas realidades crean los resultados que tienes en tu vida. Ambas realidades forman la persona que eres ahora mismo.
La mezcla de tu realidad interna (cómo te ves a ti) y la realidad externa (cómo ves el mundo que te rodea) crean tu realidad total. Recuerda que lo que crees que es real se convierte en realidad.
Cambiando mi realidad:
Si quieres cambiar tu realidad, lo primero que tienes que hacer es darte cuenta de que hay dos tipos de realidad. Primero, tenemos la realidad interna y luego, la realidad externa.
Date cuenta de esto para así ser más efectivo a la hora de cambiar tu realidad. Podrás dividir una hoja de papel en dos columnas. La primera puede ser la columna de tu realidad interna. La segunda columna puede ser la columna de tu realidad externa.
Ahora que has hecho esta división, que no necesariamente tiene que ser en un papel, podrás empezar a escribir todas las creencias que tienes de tu realidad interna. Escribe todas aquellas creencias que puedas pensar que tienes.
Luego, escribe todas las creencias que tengas con respecto a tu realidad externa en la segunda columna.
Una vez hayas hecho esta distinción, empieza a ver las creencias y empieza a darte cuenta de las creencias que no te benefician, de las creencias que no son tuyas propias y de las creencias que impiden que crezcas y te desarrolles y que vayas hacia delante.
Date cuenta que estas creencias que tienes de tu mundo interno y de tu mundo externo determinan los resultados que tienes en tu vida. Tú creas tu propia realidad. Es así de sencillo. Hay gente que todavía vive como zombies y no se dan cuenta de que pueden diseñar su propia vida. Si tú estás leyendo esto significa que ya te has escapado o estás empezando a escaparte del marco de lo políticamente correcto. Lugar donde opera la mayoría de personas de este mundo.
Si tu ya has despertado, significa que sabes que tú creas tu propia realidad.
Bien. Sigamos.
Una vez hayas hecho la distinción entre tu realidad interna y tu realidad externa, es hora de eliminar esas creencias que no te benefician y empezar a adoptar creencias que sí te vayan a ayudar a ir hacia delante en tu vida.
Para hacer esto, solo tienes que tachar esas creencias que no te llevan a ningún lugar y escribir nuevas creencias.
Nuevas creencias para tu realidad interna:
Empieza a escribir nuevas realidades de tu mundo interno.
Te dejo ejemplos de lo que podrías poner:
Soy suficiente y tengo un don para inspirar a los demás.
Soy atractivo y tengo la capacidad de influir en la vida de los demás.
Siento que tengo un poder mental increíble.
Soy extremadamente creativo y diseño cosas increíbles.
Esto son solo ejemplos. Lo ideal sería que identificases aquellas creencias que te gustaría adoptar de ti mismo. Es muy sencillo de hacer, pero los resultados son increíbles.
Nuevas creencias para tu realidad externa:
Por otro lado, tenemos las nuevas creencias para tu realidad externa.
Te dejo otra vez ejemplos de lo que podrías poner:
Las personas son buenas por naturaleza.
El mundo se desarrolla de manera increíble.
La gente necesita de mi ayuda para iluminarles la vida.
La gente disfruta con mi presencia.
Otra vez, esto no son más que ejemplos. Lo ideal sería que escribieses las creencias que quisieses adoptar sobre tu mundo externo.
Lo más increíble de todo, es que cuando eres capaz de identificar aquellas creencias que te limitan, puedes cambiarlas por creencias que te vayan a impulsar a ir hacia arriba, en vez de limitarte y dejarte tirado en el sofá de tu casa o lamentando tu existencia.
¿Qué puedo hacer para empezar a adoptar mis nuevas creencias?
Lo primero que tienes que hacer es ser consciente de los pensamientos que tienes. Cuando eres consciente de lo que piensas y lo que te dices, podrás identificar tus creencias limitantes.
Cuando te des cuenta de los pensamientos que tienes, solo tendrás que cambiar esos pensamientos por pensamientos mejores. Esto no es difícil, ya que el ser humano tiene la capacidad de elegir los pensamientos que rondan por su cabeza. Permítete el lujo de adoptar pensamientos positivos que vayan acorde con las nuevas creencias que has establecido para ti.
Eso es lo primero que debes hacer: Ser consciente de los pensamientos que pasan por tu cabeza y elegir mejores pensamientos.
Lo segundo que puedes hacer es utilizar el factor de la repetición a tu favor. En varios artículos hablo de la importancia de la práctica y la repetición para el cambio. No cambiaremos nuestras creencias de la noche a la mañana, especialmente si estas creencias que teníamos llevan con nosotros años y hasta décadas.
Hazte una lista de afirmaciones que vayan en línea con tus creencias. Por ejemplo, si una nueva creencia que quieres adoptar es que eres suficiente, podrás empezar a hacer una lista de afirmaciones que vayan acorde con esa nueva creencia que quieres adoptar. Ejemplo de estas afirmaciones pueden ser cosas como: Me encanta hablar con personas nuevas porque sé que soy suficiente y nunca necesito la aprobación de los demás para hacer lo que quiero.
Una vez establezcas estas afirmaciones, podrás repetírtelas todos los días. Al repetir estas afirmaciones, tendrás que decirlas en alto y sintiendo que ya te crees lo que estás diciendo.
Con el tiempo verás cómo tus creencias limitantes desaparecen y las nuevas creencias que quieres adoptar se hacen hueco en tu cabeza, para cambiar por completo tu realidad.
Hay personas que han experimentado cambios impresionantes cambiando sus creencias. Personas con una autoestima por los suelos que han conseguido convertirse en personas carismáticas y con una confianza de hierro. Personas que eran absolutamente pobres y acabaron siendo ricas o incluso deportistas de élite como Michael Jordan, que a pesar de tener dificultades cuando era pequeño para jugar en el equipo de baloncesto, se convirtió en una leyenda del baloncesto.
Recuerda, cambia tus creencias y cambia tu vida.
A vuestro éxito,
Miguel Franco.
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